Como antaño...

¡Qué nervios! Tengo muchos informes por entregar y muchas reuniones con padres antes del 1 de julio.

Esto me ha recordado a mi época de estudiante universitaria (aquellos maravillosos años...) llegaba junio y era un estrés... Con el calor, las ganas de salir y las pocas de estudiar.... me pasaba los días tachándolos del calendario hasta que llegaran las ansiadas vacaciones...

Pues este año más o menos igual... Encerrada en casa, venga a teclear en el ordenador, calculadora para arriba y para abajo corrigiendo pruebas... haciendo malabarismos en la agenda para llegar a todo... La sensación de que no me va a dar tiempo a terminar lo que tengo pendiente.... ufffffffffffffff..... Pero después pienso en el 1 de julio y... mmmmm, hace mucho tiempo que no tengo unas vacaciones completas, de desconexión total.... Pero bueno, desconectar del todo para mi es prácticamente imposible.... Bueno, el caso es que yo me hago cada día mi listado de las tareas que tengo que hacer, y cuando tacho algo que he terminado ¡ufff, subidón!....

Cuando me agobio pienso ¡1 de julio, 1 de julio! y me imagino paseando por la playa tranquilamente con la satisfacción de haber llegado a cerrar todos los asuntos laborales pendientes... espero que así sea.... 1 de julio... ¡ ven ya !